Ovarios y neuronas vacilantes

Ya no me extraña ninguna noticia que llega más allá del muro que separa nuestra civilización occidental, de otras. Esta vez ha sido en Arabia Saudí. A un clérigo islamista no se le ha ocurrido otra cosa, en el debate que actualmente tienen de si se permite a la mujer conducir o no un coche- que utilizar el siguiente argumento a favor de continuar con la prohibición actual: «Si una mujer conduce un coche sin que sea absolutamente necesario podría sufrir impactos psicológicos negativos, toda vez que hay estudios médicos fisiológicos y funcionales que demuestran que la conducción afecta automáticamente a los ovarios y presiona la pelvis hacia arriba», ha afirmado el académico islámico. «Por eso encontramos que aquellas que conducen habitualmente tienen niños con problemas clínicos de diferentes niveles», ha asegurado, en una entrevista concedida a la publicación digital Sabq.org. No se indica en la noticia (1) que el jeque sea un especialista en pelvis y ovarios… ¡pero vaya usted a saber!

El dechado de inteligencia del que hablamos se llama Salé al Lohaidan.

Notas

(1)    Un clérigo árabe afirma que las mujeres que conducen tienen daños en los ovarios. Léala con piedad y misericordia, en: http://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/09/29/actualidad/1380450821_096857.html  ¡O con indignación, como usted quiera!

Miguel Villarroya Martín, a  29 de septiembre de 2013 / Ref.188