Nissim y su Lámpara Maravillosa

En mi niñez existían ya el teléfono, la luz y el radio de bulbos; entre otras cosas…

Los cuentos infantiles eran muchos, pero yo me acuerdo de Aladino y la Lámpara Maravillosa…

Se trata de un niño que poseía una lámpara que con solo frotarla aparecía un genio: “A tus órdenes amo” le decía.

El niño entonces le pedía un deseo y el deseo le era concedido totalmente.

Aladino merced a tener la lámpara maravillosa era un niño muy feliz, bastaba con frotar la lámpara, aparecía el genio y su deseo era concedido.

Hace algunos meses mis seres queridos me regalaron una Laptop.

Tiene tantas funciones que hoy todavía no me las aprendo todas.

Funciones y aplicaciones sorprendentes…

Hace algunos días accidentalmente toque una tecla para mi desconocida:

De pronto, se oye un sonido muy agradable de una  campanita, se ilumina la pantalla, una brillante raya ondulante aparece junto con un letrero “

–          ¿En qué te puedo ayudar?”, me pregunta…

Como si hablara con una persona yo contesto Calendario, y ella a su vez me contesta con una melodiosa voz,

–          ”Encontré once citas”-,  y me las muestra todas en la pantalla.

Maravillado e intrigado yo vuelvo a apretar el botón suena una agradable tonadita y aparece el letrero en qué te puedo ayudar, yo con voz clara y precisa le hablo, esta vez le pido recordatorios.

–           Estos son tus recordatorios. Con una dulce voz, nuevamente aparecen en la pantalla claramente definidos todos mis recordatorios.

¡Por demás está decir que a estas alturas del juego yo ya estaba maravillado, me parecía increíble y mi entusiasmo iba en aumento!

Volví nuevamente a apretar el botón pero ahora mañosamente me quedé callado.

–          Puedes pedirme cosas como estas-  me dice:

–          Reproducir música.

–          ¿Tengo llamadas perdidas?

–          Comprobar si tengo correo.

–          Abre fotos.

–          Busca una gasolinera.

Y crease o no, una serie de sugerencias útiles que no me alcanzaría toda esta hoja para anotarlas…

Vuelvo a apretar el botón y otra vez me quedo callado.

Una comprensiva voz:

–          “No te entendí bien”

Nuevamente oprimo el botón y esta vez le pido en buena forma mis contactos; basta un parpadeo, en la pantalla aparecen todos mis contactos listos para ser utilizados…

De pronto oigo a mi esposa gritarme:

–      Nissim la cena está lista.

–      Ya voy contesto, apago mi Laptop.

–      Con quién hablabas, me pregunta mi esposa.

–      Con mi Laptop.

–      Mentiroso, no te lo creo, me dice sonriendo…

Nissim Mansur T. / Junio 28/14 / mansurnissim@gmail.com

 

Nota de MVM: Simpático encuentro de Nissim con su (laptop) portatil. LdF.083